NUEVO
¿A QUE RESPONDE EL FENOMENO OKUPA?
Es común
encontrar entre la opinión publica el estigma que las y los okupas son perro
flautas indeseables y vagas/os que no pegan palo al agua. Pero en los últimos
años el incremento que se está dando de personas que viven de este modo es
considerable. ¿A qué se debe este fenómeno?
(esta foto estaría guai modificarla y que solo salga el bocadillo de arriba y en vez de poner una beca que ponga renta de inclusión social)
Es posible que
el fenómeno de la okupación responda en algunos casos a que más de una/o haya
tenido la osadía de tomarse en serio el artículo 47 de la Constitución: “Todos los españoles tienen derecho a
disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Los poderes públicos promoverán las
condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer
efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo de acuerdo con el
interés general para impedir la especulación”.
Sin
embargo, también es posible que haya otros que, visto lo visto, no acaben de
creerse que los gobernantes tengan voluntad alguna de hacer realidad ese derecho. Como consecuencia de ello,
okupan. No desalojan a otros de sus viviendas, no privan a nadie de su derecho
a vivir en su propia casa, sino se
limitan a vivir bajo un techo. Un techo a menudo abandonado y a la expectativa
de algún suculento pelotazo especulador.
Para
EtxebizitzaTX, grupo de trabajo del Movimiento Juvenil de la Txantrea y que
desarrolla su trabajo en la Oficina de Emancipación, la okupación es un método
de emancipación para los jóvenes que nos encontramos con grandes dificultades
para llevarlo a cabo por medio de la limitadora oferta institucional, ya que
actualmente nos encontramos en un angosto callejón sin salida. A su vez,
consideramos que la okupacion también es un instrumento de denuncia, de
reivindicación y de lucha contra un sistema que solo vela por los intereses de
aquellas/os que más tienen. La okupación es una alternativa necesaria que nace
de un acto de desobediencia y que encuentra su legitimidad en un sistema que
deja a seres humanos en las calles.
La okupación comienza a ser una alternativa, una forma diferente de
concebir la vida y la sociedad, los derechos civiles y sociales y las reglas
económicas de juego actualmente vigentes.
Hoy por hoy, parece
ser que una sociedad no puede subsistir durante mucho tiempo sin que se
garantice a la ciudadanía el derecho a la propiedad. Sin embargo, tampoco puede
dar la espalda a otros derechos ciudadanos aún más fundamentales, entre ellos, el
derecho a la dignidad personal. Toda persona aspira a poder desarrollarse y
realizarse digna y plenamente como ser humano. De ahí que se reivindique, por
ejemplo, el derecho a la libertad y al honor, a la libre expresión de sus ideas
o a la huelga, al trabajo o a la educación. En este mismo contexto, el derecho
al disfrute de una vivienda constituye una parte esencial de la dignidad
personal y social de los seres humanos, y su reivindicación efectiva no debería
sentirse condenada al mundo de lo subversivo y lo marginal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario